Cádiz


Un fin de semana en Cádiz es una perfecta excusa para disfrutar de esta ciudad. Su casco viejo, sus largas playas y el mar, rodeando la ciudad por todas partes nos harán sentir buenas sensaciones.
Yo estuve en el Tryp La Caleta, en el corazón de la playa Victoria. Una buena opción si además decimos que vamos en comisión de servicio. Ojo el desayuno es caro y merece la pena visitar los bares que hay detrás del Hospital, cruzando la Avenida de Andalucía. Si además pagamos suplemento, tendremos las habitaciones con vistas al mar.
Alrededor de este hotel hay un montón de posibilidades gastronómicas, casi siempre a base de tapeo, como en el Arte Serrano, o pescaíto en cucuruchos, en las Flores; también podemos optar por una mágnifico arroz en La Marea, recomiendo el de carabineros y puntillitas, rico, rico.
Los pubs de alrededor están muy decorados. Si seguimos el paseo marítimo hacia el este, atravesando unos soportales bajo un hotel, llegaremos a la Taberna de los Piratas (ver foto), muy bien decorada tanto por fuera como por dentro.
Del casco viejo, a parte de pasear por sus calles, no hay que dejar de ver la catedral, Puerta de Tierra, la Torre Tavira y en general sus plazas y callejuelas. Intentar llegar hasta La Caleta donde veremos también el Ficus Centenario, probablemente uno de los árboles más grandes que podáis haber contemplado. Aconsejo coger el bus turístico para hacer una ruta general de la ciudad
Qué la disfrutéis.
En las fotos podéis ver la Taberna de los Piratas, el Ficus Centenario, Ayuntamiento, iluminado para la navidad, la playa de La Caleta, la Catedral, Puerta de Tierra y la estatua de esta bella mujer que está enfrente del hotel Tryp y que contempla la playa Victoria.



1 comentarios:

Apotecari dijo...

Si vais a Cádiz no os recomiendo ir a comer pescadito frito a Las Flores (Plaza de las Flores, en el centro del casco viejo). Nosotros pedimos medio kilo para 2 personas de fritura y según ellos era poco y nos iban a traer un poco más, cuando aparecieron con una fuente metálica con el pescado que entre el pescado la fuente y el medio limón no pesaba medio kilo. Una fuente con una cantidad ridícula, se llevaron la fuente y nos la volvieron a traer diciendo que había 550 gramos, eso si el limón y el pescado en la fuente seguía colocado tal cual. Por lo que optamos por pagar las cañas, e irnos y dejar alli la fritura ante la evidente tomadura de pelo. La verdad que la experiencia nos dejó muy mal sabor de boca de nuestra visita a Cádiz.

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