Todos sabemos que en Andalucía es típico el "pescaíto" frito y en muchos lugares lo venden en los "cartones" o cucuruchos de papel. Uno de estos lugares es la Freiduría Las Flores de Cádiz (Pl. de las Flores). En una visita a al ciudad decidimos comer en este lugar y pedimos medio kilo de fritura variada para dos personas (más que suficiente al menos cualquier otro lugar de Andalucía). El camarero nos dijo que nos traería un poco más y cual fue nuestra sorpresa que en lugar de servirnos la fritura como en el resto de las mesas en cucuruchos de papel, nos trajo la fritura en una bandeja pequeña, que a todas luces no pesaba medio kilo ni con la bandeja (métalica) y el medio limón (estamos muy acostumbrados a comer pescado frito al peso pues vamos con frecuencia a Sevilla). Ante nuestras protestas, se fue y volvió con al misma bandeja (el limón seguia en el mismo lugar) y alegando que pesaba 550 g (en ningún momento nos pidió que le acompañáramos para comprobar que efectivamente ese era el peso). Ante lo que era una evidente tomadura de pelo, y sintiendonos defraudados y engañados, pagamos nuestras cañas de cerveza y le pedimos que se llevará a "bandejita" y nos fuimos. La experiencia nos dejo un mal recuerdo de lo que pudo ser un bonito día en Cádiz.
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